Durante el verano de 1994 llegó a las salas de cine una adaptación libre del cómic de Dark Horse: La Máscara. La cinta se convirtió en un éxito en taquilla y fue la responsable de catapultar a Jim Carrey como una de las estrellas más importantes de la industria. La secuela se estrenó más de una década después, pero El hijo de la Máscara (2005) fue un fracaso comercial y crítico que sepultó la franquicia. Ahora, el creador original del personaje tiene en mente un reboot femenino.
El fundador de Dark Horse Comics, Mike Richardson, conversó recientemente con Forbes en el marco del 25 aniversario del estreno de la cinta original de La Máscara dirigida por Chuck Russell. El creador del personaje, quien también fungió como productor en las dos cintas de Hellboy dirigidas por Guillermo del Toro, confesó que ya tiene a una protagonista en mente, aunque no reveló el nombre de la actriz en cuestión.
«Me gustaría ver a un comediante físico realmente bueno [en el papel]. Tengo a alguien en mente, pero no voy a decir su nombre. Tenemos que convencer mucho a esta actriz en particular, pero ya veremos … Nunca se sabe lo que vendrá en el futuro. Tenemos algunas ideas», dijo Richardson.
“La Máscara” ya ha sido portada por personajes femeninos en los cómics originales. Tan solo en el primer arco de la historia en 1991, el artefacto estuvo en posesión de Kathy, la novia de Stanley Ipkiss, quien descubrió el terrible costo que tiene este poder en los humanos. En otra historia titulada The Hunt For Green October (1995), una niña llamada Emily usó sus poderes para vengarse de sus compañeros y maestros abusivos.
En ese sentido, Mike Richardson aseguró que una nueva entrada en la franquicia cinematográfica regresaría al núcleo narrativo de los cómics y la primera cinta de 1994: ¿qué harías si tuvieras un poder absoluto sin ninguna restricción moral?
«El tema principal de La Máscara era ¿qué haríamos si tuviéramos el poder absoluto como Stanley Ipkiss? Cuando obtenemos el poder absoluto, a menudo recurrimos a los esfuerzos más pequeños y debemos superar nuestra naturaleza humana y usar el poder para el bien. Stan Lee dijo: ‘un gran poder conlleva una gran responsabilidad’, pero lo mío es un axioma más antiguo que es: ‘el poder absoluto corrompe absolutamente’«.
