Nostalgia y televisión es una fórmula que casi siempre funciona. Sobre todo si hablamos de una de esas series con la que muchos de los actuales treintañeros crecieron. Que sí, que por aquí también éramos más de Aquellos maravillosos años y las historias de Kevin y Winnie, pero hay que reconocer que Salvados por la Campana también tiene un hueco en nuestra memoria televisiva de los 90.
Mientras empezamos a recordar la sintonía de la seria y las absurdas historias de Zack Morris, Kelly Kapowski, Screech, Slater y compañía en el colegio, seguro que a los fans de Save by the Bell les encantará saber que esta serie ya tiene su propio restaurante temático.
Se llama Save by the Max (The Max era el nombre de la cafetería donde se reunían), y su apertura en Chicago ha sido un auténtico éxito. Tanto que aunque se planteo como un local efímero que sólo estaría abierto en junio, finalmente estará activo hasta, por lo menos, finales de agosto.
Con la misma estética que aquella cafetería de la televisión y un menú repleto de hamburguesas, batidos y nombres de platos que homenajean a los personajes de esta historia de adolescentes, a diferencia de los que se estilaba en la serie, aquí también se sirven cócteles con alcohol.
Y es que los niños de los 90 ahora ya tienen una edad, y no sólo pueden beber sino que posiblemente lo necesitarán para superar los ataques de vergüenza ajena que da recordar los diálogos y tramas de aquella teleserie.
Detrás del proyecto está Derek Berry, un treintañero obsesionado con esta serie emitida por la cadena NBC entre 1988 y 1992, y que trabaja organizando eventos relacionados con la década de los 90.
A la espera de que los principales protagonistas se pasen por allí -no está muy claro si la presencia de Screech sería buena idea dada su polémica carrera posterior-, por ahora el actor que hacía el papel de Max estuvo presente en la inauguración, vestido para la ocasión con la misma indumentaria con la que ejercía de cocinero y camarero en el bar de la serie.
