Cada personaje de Winnie the Pooh representa una enfermedad mental

TV & SERIES | 21 Jun, 2019
PÁSALAS

Winnie the Pooh‘ marcó varias generaciones de niños. Alan Alexander Milne es el autor de esta saga de libros infantiles, pero fue la adaptación de Disney quien le otorgó la verdadera fama al conocido oso amante de la miel. Desde que vio la luz la versión animada en 1966 se han creado multitud de películas, cortometrajes, series y, por supuesto, merchadising.

Lo que no se ve a simple vista en esta inocente saga infantil es el significado oculto que tiene escondido cada uno de sus personajes. Y es que, según un estudio de la Canadian Medical Association, cada uno de los animales que protagonizan las historias de ‘Winnie the Pooh’ representan un trastorno mentaldiferente.

Sin duda, si esto es real, es un detalle muy positivo, pues no está de más mostrar a los niños algunas patologías que cualquier persona puede tener. Pues no quiere decir que los personajes estén locos o tengan trastornos peligrosos para su entorno, sino que pasan por una de estos problemas psicológicos, algunos más comunes de lo que se cree.

Winnie the Pooh

Winnie the Pooh tiene, según el estudio, varios trastornos diferentes: déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Su conducta es algo dispersa y desordenada y es algo olvidadizo. Aun así, el que más destaca en Winnie the Pooh es el trastorno alimenticio, que desemboca en su obesidad.

Según los investigadores, su personalidad denota todos estos trastornos: “La perseverancia de Pooh en los alimentos y sus comportamientos repetitivos de conteo aumentan la posibilidad de ser diagnosticado de trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Dado su TDAH y TOC coexistentes, nos preguntamos si Pooh podría presentarse con el síndrome de Tourette con el tiempo”.

Piglet

Piglet, el tímido compañero de aventuras de Winnie the Pooh, tiene un trastorno bastante notorio: desorden de ansiedad generalizado. El pequeño cerdito vigila a todo el mundo, siente miedo por todo y se estresa con facilidad. El estudio detecta en él un exceso de preocupación e intranquilidad con respecto a todo.

Tigger

Tigger es otro de eso personajes tan queridos de Winnie the Pooh. El tigre saltarín tiene incluso su propia película, y es que su actitud divertida y bonachona hace que sea llamativo y atractivo. Aun así, su comportamiento parece tener algo detrás.

De igual forma que Winnie the Pooh, pero más acentuado, Tigger sufre de déficit de atención, hiperactividad y problemas de concentración. Es un personaje muy impulsivo, inquieto y constantemente actúa de forma arriesgada.

Igor

La personalidad característica de Igor es en sí su propio desorden. Es muy negativotriste y sufre de depresión. De hecho, Igor es claramente similar a Tristeza, el personaje de ‘Del revés’.

Aun así, la depresión siempre viene ocasionada por algún hecho pasado, por lo que los creadores del estudio no pueden asegurar este trastorno: “No tenemos suficiente historia para diagnosticar esto como una depresión heredada y endógena o para saber si algún trauma inicial contribuyó a su negativismocrónico y a la baja energía”.

Búho

Búho es uno de los más inteligentes del Bosque de los Cien Acres, pero sufre de dislexia. Se puede ver en algunos letreros de su casa que están mal escritos o con las letras cambiadas. Este contraste le hace sentirse pequeño, por lo que tiene algunos “intentos de encubrir sus déficits fonológicos similares a los que vemos día tras día en otros tan afligidos”.

Pero su trastorno no se queda ahí, pues este personaje es considerado el más sabio pero parece ser todo un fanfarrón. A pesar de todos los libros que tiene, no sabe leer y cuando le piden consejo siempre termina desviando el tema. Esta idealización de sí mismo hace ver que es muy narcisista, por lo que tiene una concepción de grandiosidad propia, falta de empatía por los demás y necesidad de atención constante.

Conejo

Conejo es, como Búho, otros de los personajes más maduros de ‘Winnie the Pooh’. Es un personaje muy trabajador y se emplea a fondo en mantener su huerto perfecto y limpio. De hecho, parte de su tiempo lo dedica a limpiar sobre limpio.

Está claro que lo suyo es el trastorno obsesivo compulsivo (TOC), que también lo relaciona el estudio con Winnie the Pooh por sus actitudes repetitivas. De la misma forma que el protagonista, Conejo está obsesionado por la repetición de ciertas acciones e ideas, perdiendo el control en ciertas ocasiones. La rutina diaria de Conejo es el trabajo excesivo de su huerto y, de hecho, se pone de mal humor cuando le sacan de esta norma.

Rito

Rito, el pequeño canguro, va acompañado de su madre a todas partes. Sin embargo, uno de sus mejores amigos y al que más imita es a Tigger, lo cual le desemboca en una patología similar.

La hiperactividad es uno de los trastornos que denota Roo, pero su personalidad parece ir más allá, pues podría padecer autismo. Le cuesta prestar atención a su alrededor y no se suele relacionar demasiado con el resto de amigos.